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jueves, 26 de junio de 2014

Otra definicion de cura analitica

Se podría seguir a "Nasio cuando propugna que no se trata de un Inconsciente del analista y un Inconsciente del analizante, y afirma que se trata de un Inconsciente de la transferencia y, agregamos, de cada transferencia;" de la misma forma, "no habría un deseo del analista y un deseo del analizante sino un deseo de análisis, un deseo que trama a ambos partenaires y que está conducido por la búsqueda de la verdad, aunque sea a medias. Y, además, por un interrogante mayor y una causa específica. La pregunta por el ser y la pregunta acerca del por qué de esa forma de goce. A ello Freud lo llama, sencillamente, cura y para ello, precisamente, inventó el método psicoanalítico."
 
Bibliografía:
  • Gómez, A.M. (2014). La persona de los analistas. Imago Agenda. N°179.

jueves, 22 de mayo de 2014

¿Qué puede hacer el psicoanalisis por un sujeto sujetado a su inconsciente?

En el prólogo de Historias inconscientes encuentro estos párrafos que quiero compartir:
" 'Yo soy una persona intolerable' me dijo cierta vez un paciente queriendo decir que era  intolerante. Y en esa ruptura que se produce cuando el inconsciente habla por nosotros, se abre una brecha entre la libretad de decir y lo que realmente se dice.
El hombre no es más que un sujeto sujetado a su inconsciente por las cadenas del lenguaje y, a partir de este hecho, la libertad se vuelve imposible. Y tal vez este sea uno de los más grandes retos de la condición humana: soñar, luchar e incluso dar la vida por una libertad que está, desde el vamos, perdida para siempre.
Es allí en donde el Psicoanálisis encuentra un espacio posible. No para apostar a la utopía de convertir a un sujeto en alguien libre, sino para propiciar que, al menos, transite por los caminos que le marca su deseo."
 
Bibliografía:
  • Rolón, G. (2014). Historias inconscientes (vidas al límite). Planeta. Páginas 11 y 12.

jueves, 26 de diciembre de 2013

Relacion entre el sintoma y otras formaciones del inconsciente

Respecto de lo que Lacan llama formaciones del inconsciente, Miller dice: “Los sueños se borran. Son seres que no consisten, de los que a menudo solo tenemos fragmentos en el análisis. El lapsus, el acto fallido, el chiste, son seres instantáneos, que fulguran, a los que les damos en el psicoanálisis un sentido de verdad pero que se eclipsan inmediatamente. […] Entre esas formaciones del inconsciente está el síntoma. […] se  distingue de todas las otras formaciones del inconsciente por su permanencia. […] Para que haya síntoma es necesario también que el fenómeno dure. Por ejemplo, el sueño cambia de estatuto cuando se trata de un sueño repetitivo. Cuando el sueño es repetitivo implicamos un trauma. El acto fallido, cuando se repite, se vuelve sintomático.
 
Bibliografía:
  • Miller, J. A. (2012). Leer un síntoma. Revista Lacaniana Nº12, Ed. Grama, Bs.As.

miércoles, 14 de agosto de 2013

Lo inconsciente como un hecho de lógica

"Pero lo consciente es una noción muy equívoca, no sabemos qué es. Se trata de un asunto muy comprometido. Quisiéramos definirlo por un saber inmediato y cierto, por una transparencia, pero ¿Qué sabemos? Lo que creemos saber. El sujeto consciente no es más que un sujeto que se supone sabe: sabe lo que piensa, lo que quiere, lo que ama, aquello de lo que goza, aquello por lo que sufre. Pero la experiencia del análisis nos muestra que el sujeto es una falsificación, que en verdad no sabe, se contradice, cambia de opinión, cambia de saber. De hecho, lo que llamamos inconsciente es un hecho de lógica, es lo que se deduce de lo que se dice."


Bibliografía:
  • Miller, J. A. Sutilezas analíticas. Capítulo VII: Tres modalidades de análisis. ISBN: 9789501288612

domingo, 5 de mayo de 2013

El deseo es el deseo del Otro

En el prólogo del libro "El orden médico", Antoni Vicens, habla del deseo inconsciente para introducir luego el tema del goce. Considero que lo que menciona puede servir para explicar parte de la fórmula "El deseo es el deseo del Otro".
Vicens dice que "El inconsciente estructurado como un lenguaje es el inconsciente descubrierto por Freud. Aunque él no lo formulara con estas palabras, las obras fundamentales de Freud [...] convergen exactamente en esta hipótesis. El deseo humano adquiere acá un nuevo análisis. «No hay un inconsciente porque hay un deseo obstuso, pesado o incluso animal, un deseo incosnciente surgido de las profundidades, que sería primitivo y que tendría que elevarse al nivel superior de lo consciente. Muy al contrario, hay un deseo porque hay un inconsciente, es decir, lenguaje que se le escapa al sujeto en su estructura y en sus efectos, y porque hay siempre en el nivel del lenguaje algo que está más allá de la conciencia; y es ahí donde puede saturarse la función del deseo». Esos excesos de lenguaje para el sujeto le delimitan un lugar distinto de él, el lugar del Otro, en el que reside el lenguaje que está excluido de su ominio. Y en ese lugar está el goce."



Bibliografía:
  • Vicens, A. (1978) Prólogo en El orden medico. Editorial Argot. Paris. ISBN: 84-85860-05-5

martes, 5 de febrero de 2013

El inconsciente es siempre inconsciente

A lo largo de la entrevista que le realizaron a Jung en 1959 repite varias veces que el inconsciente es siempre inconsciente. Una de esas veces dice que "la personalidad completa del hombre es indescriptible. Su consciente puede ser descripto, su inconsciente no puede ser descripto porque el inconsciente es siempre inconsciente. Es realmente inconsciente, no lo conocemos. Asi que no conocemos nuestra personalidad inconsciente. Tenemos indicions, ciertas ideas pero no lo conocemos en realidad."

Referencia:

sábado, 26 de enero de 2013

Autonomia de los pensamientos insconscientes

En una entrevista a Jung que le hicieron en 1959, él comenta que "éste fue mi primer punto de diferencia con Freud. Los pensamientos que se volvieron inconscientes se habian escondido por voluntad propia. No había represión. Tenían cierta autonomía, así descubrí el concepto de autonomía. Y esos pensamientos tienen el poder de actuar independientemente de mi voluntad. Incluso aparecen cuando quiero decir algo en concreto, interfieren y hablan por ellos mismos en vez de lo que yo quería decir. O me hacen hacer algo que yo no quería hacer. O se esconden cuando los quiero usar, desaparecen. "



Referencia:
  • Entrevista completa. Minuto 14. (En: http://www.youtube.com/watch?v=ekBu0kTdzAw)

lunes, 17 de diciembre de 2012

El insconsciente colectivo y los arquetipos

El inconsciente colectivo es una parte de la psique que se distingue del inconsciente personal por vía negativa, ya que no debe su existencia a la experiencia personal. Además el contenido del inconsciente personal fue consciente en algún momento y luego devino inconsciente por olvido o represión mientras que los contenidos del inconsciente colectivo nunca estuvieron en la consciencia y por eso nunca fueron adquiridos por el individuo sino que existen exclusivamente debido a la herencia.
Este inconsciente colectivo consta de formas prexistentes que son los arquetipos. Éstos pueden llegar a ser conscientes sólo de modo secundario y dan formas definidas a ciertos contenidos psíquicos. Estos arquetipos están presentes siempre y en todo lugar.
Según Jung, los impulsos tienen analogías muy exactas con los arquetipos, tan exactas que hay razones para suponer que los arquetipos son las imágenes inconscientes de los propios impulsos o, dicho de otra forma, son el modelo paradigmático del comportamiento instintivo.
Hay tantos arquetipos como situaciones típicas en la vida. Una repetición interminable ha grabado esas experiencias en nuestra constitución psíquica, no en forma de imágenes llenas de contenido, sino al principio casi únicamente como formas sin contenido, que representan la mera posibilidad de un cierto tipo de percepción y de acción. Cuando surge una situación que corresponde a un arquetipo determinado, éste es activado y aparece una compulsión que, como una fuerza instintiva, sigue su camino contra toda razón o produce cualquier otro conflicto de dimensiones patológicas, o sea, una neurosis. Jung considera que las neurosis no son asuntos privados sino fenómenos sociales.

Bibliografía:
  • Jung, C. G. (1936) El concepto de inconsciente colectivo.

sábado, 23 de octubre de 2010

Leyes del proceso primario

Leyes o principios según los cuales se rige el proceso primario:
  • Atemporalidad: no hay registro del tiempo ni un orden sucesivo. Es un constante presente.
  • Ausencia de negación: se admite la convivencia de términos contradictorios.
  • Sustitución de la realidad exterior por la realidad psíquica: no se distingue entre lo subjetivo y lo objetivo.
  • Principio del placer.
  • Desplazamiento: se transfiere la carga psíquica de una representación a otra.
  • Condensación: se fusiona en una representación varias representaciones.

martes, 28 de abril de 2009

Segunda topica del aparato psiquico

En 1920, Freud plantea la segunda teoría del aparato psíquico que no anula la anterior sino que la integra (en el próximo post veremos cómo). En esta tópica se divide al aparato psíquico en tres instancias:
Ello: se dice que es el reservorio de las pulsiones ya que cuando nace el bebé es puro ello, pura pulsión y es incapaz de hacer una diferenciación yo-no yo. Esta instancia es totalmente inconsciente y por lo tanto su funcionamiento también se rige por el proceso primario. El ello busca la satisfacción inmediata de las tensiones que aparecen porque está regulado por el principio del placer-displacer.
Yo: tiene partes conscientes, preconscientes e inconscientes. Es una instancia que se desarrolla a partir del ello por un proceso de maduración y por influencia del mundo exterior. Al principio no hay diferencia entre yo (sujeto) y no yo (objeto) y a medida que se va desarrollando, el yo pasa por tres momentos:
  • Yo de realidad inicial: hay una primera diferenciación entre el adentro (son los estímulos constantes de los cuales no puede huir [pulsiones]. Por ejemplo el hambre) y el afuera (son los estímulos de los que puede sustraerse por medio de una acción muscular. Por ejemplo al estimularle la planta del pie puede retirarla o encoger la pierna). La satisfacción pulsional aún cuando provenga del objeto es experimentada como autoproducida.
  • Yo de placer purificado: el yo incorpora como propio todo lo que le da placer y expulsa lo que le produce displacer. El objeto es depositario de lo displacentero y se constituye en lo odiado.
  • Yo de realidad definitivo: el yo es capaz de discriminar el mundo interno del externo, se instaura el principio de realidad. Sus funciones principales son: percepción, memoria, pensamiento, dominio motor, represión, resistencia y examen de la realidad.
Superyó: tiene partes conscientes, preconscientes e inconscientes. Es la instancia normativa de la personalidad ya que es la que indica al yo qué está bien y mal según los valores transmitidos a través del sistema de castigos y recompensas inherentes al proceso de socialización. Es la última instancia en formarse y surge como consecuencia de la restricción de los impulsos libidinales y hostiles ligados al complejo de Edipo. Sus funciones son:
  • Ideal del yo: lo que hace que tengamos metas en a vida, estudiemos, trabajemos, etc.
  • Conciencia moral: lo que hace que sepamos lo que está bien y está mal
  • Autoobservación: lo que nos está evaluando constantemente

lunes, 27 de abril de 2009

Primera tópica del aparato psiquico

Freud emplea el término "tópicas" (del griego topos = lugar), en sentido metafórico, para indicar que no se puede comprender el psiquismo humano sin un modelo espacial que nos represente distintas regiones con su modo propio de funcionamiento y sus mutuas relaciones.
Las tópicas son teorías respecto de la conformación y funcionamiento del aparato psíquico. Freud elabora su primera tópica en los últimos años del siglo XIX, la cual revisará en 1920, momento en que formula la segunda tópica (que no anula la primera).
La primera tópica divide al aparato psíquico en tres sistemas:

Inconsciente: puede entenderse en dos planos:

  • Plano descriptivo: es todo contenido psíquico que está fuera del campo de la conciencia. De este modo incluye tanto lo preconsciente como lo inconsciente.
  • Plano tópico: es uno de los tres sistemas en que se divide el aparato psíquico. Está constituido por aquellos contenidos reprimidos. Su contenido no podemos observarlo en forma directa sino que se infiere a partir de ciertas manifestaciones que se las llama formaciones del inconsciente y que son los sueños, actos fallidos, chistes y síntomas. La barrera que separa los contenidos inconscientes del resto se llama Represión. Su funcionamiento está regido por el proceso primario cuyas leyes de funcionamiento son desplazamiento (transferir carga psíquica de una representación a otra), condensación (representación que contiene en sí misma varias representaciones [síntesis]), ausencia de cronología (no hay registro del tiempo), ausencia de negación (pueden convivir términos contradictorios) y sustitución de la realidad exterior por la realidad psíquica (no hay distinción entre lo objetivo y lo subjetivo; los deseos son realizables).

Preconsciente: también puede entenderse en dos planos:

  • Plano descriptivo: como estos procesos no están actualmente en la conciencia, desde este plano serían inconscientes.
  • Plano tópico: por funcionar de forma diferente no se los considera procesos inconscientes. Estos procesos si bien no se encuentran actualmente en el campo de la conciencia, se los puede traer con un mínimo esfuerzo. Están regulados por el proceso secundario. Por ejemplo recordar qué comí ayer.

Consciente: sistema que va a recepcionar tanto los datos provenientes del mundo exterior como los del mundo interior. Es un sistema fundamentalmente actual y tiene que ver con todo aquello que sentimos (sensaciones y sentimientos) a diferencia de los sistemas preconscientes e inconscientes que son esencialmente sistemas de huellas mnémicas. En este sistema se alojan las funciones psicológicas como la memoria, la atención, etc.